La parricida de Lloret confiesa al juez que asfixió a sus hijos con una bolsa

Lianne Angela S. confesó el asesinato de sus dos hijos en la comisaría a los Mossos d'Esquadra, que la detuvieron el martes en el mismo hotel, poco después de que la mujer alertara a los recepcionistas de lo que había ocurrido.

Allí la forense le hizo una exploración concluyendo que la mujer estaba "consciente, orientada, conocedora de la situación" y que la exploración psicopatológica era "normal". En ese momento, ya confesó "espontáneamente" haber matado a sus dos hijos.

En busca y captura

La mujer ha relatado con detalle ante el juez la perpetración del delito, y ha asegurado que había actuado sola, descartándose que actuara junto a otras personas. Además, ha indicado que los servicios sociales británicos quisieron quitarle a sus hijos y que a pesar de que ella y su marido, el presunto pederasta Martin Anthony S., estuvieran en busca y captura, decidieron escapar y huir a España.

Según los investigadores, Lianne Angela S., tras la detención de su marido el 7 de mayo, empezó a sospechar que los servicios sociales la podían estar siguiendo con el fin de retirarle la custodia de sus hijos, lo que la hizo abandonar el piso de Travessera de Gràcia donde habían vivido, e irse a Lloret, donde "se produjo el fatal desenlace".

Además, el auto recoge la petición admitida por el juez del Consulado General Británico para poder visitar a Lianne Angela S., para comprobar en que estado se encuentra, los familiares a contactar para la repatriación de los cadáveres y para notificarles su detención y ofrecerle una lista de abogados.

Prisión provisional sin fianza

El juez ha decretado el ingreso en prisión provisional sin fianza para la mujer tras tomarle declaración porque "existen indicios que acreditan que cometió dos delitos de asesinato" y para evitar su fuga ya que existe "riesgo objetivo".

"Hay que hacer constar que la imputada vivía en Barcelona de alquiler, sin tener residencia fija en la población de Lloret porque vivía en un hotel. Además, carece de bienes muebles e inmuebles en propiedad. Solamente es titular de una cuenta bancaria", abunda el auto.

Asimismo, el tener la nacionalidad británica, tener una relación familiar "prácticamente nula" porque su marido ha sido extraditado al Reino Unido, y al no tener trabajo -aunque fue profesora de inglés durante unos meses en 2008-, el tribunal considera que "el riesgo de fuga es muy elevado", sobre todo porque ya huyó de la justicia de su país.