La coalición asegura que cerca de 150 miembros de Estado Islámico murieron en bombardeos el sábado en Shafá

En su comunicado, la coalición ha dicho que "los bombardeos de precisión fueron la culminación de una extensa preparación de Inteligencia para confirmar que la sede y centro de mando y control de Estado Islámico en una zona ocupada únicamente por yihadistas".

Así, ha revelado que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) --una coalición de milicias encabezadas por las kurdas Unidades de Protección Popular (YPG)-- "ayudaron en la observación del objetivo antes de los bombardeos".

La coalición ha asegurado que el lugar bombardeado "contaba con una gran concentración de combatientes de Estado Islámico que aparentemente se preparaban para desplazarse".

"Los bombardeos subrayan nuestra afirmación de que la lucha para liberar Siria está lejos de su final", ha dicho James B. Jarrad, comandante general de Operaciones Especiales de la 'Operación Apoyo Decidido'.

"Nuestros socios de las FDS están aún haciendo progresos y sacrificios diarios, y juntos seguimos encontrando, atacando y matando a terroristas de Estado Islámico que pretenden mantener su yugo extremista en la región", ha agregado.

En este sentido, Jarrad ha recalcado que "no se puede perder el ímpetu a la hora de eliminar del campo de batalla a estos terroristas y evitar que resurjan en algún otro sitio".

La coalición ha manifestado que "a pesar de que Estado Islámico ha perdido más del 98 por ciento del territorio que declaró como parte de su llamado 'califato', el grupo sigue mostrando capacidad de unir grandes números (de combatientes) para intentar mantener su presencia en Siria".