Barnier insta a Londres a "asumir los hechos duros" del Brexit y avisa de que queda poco tiempo para negociar
EUROPA PRESS
13/03/201815:47 h."Es tiempo de asumir los hechos duros", ha reclamado Barnier durante un debate sobre el Brexit en la Eurocámara en preparación de la cumbre europea en la que los líderes de la EU aprobarán sus líneas rojas para negociar la relación futura con Reino Unido.
Barnier ha dejado claro que "todo el mundo" debe entender que la negociación es "extraordinariamente completa" y que "el tiempo es muy corto para la negociación del acuerdo de retirada y será corto para la negociación de toda relación futura", así como para que cada uno de los países se prepare para "las consecuencias inevitables" del Brexit.
El jefe negociador ha dejado claro que la "responsabilidad" de los europeos es "preservar" la Unión, sus valores, identidad, su mercado común y sus políticas comunes. "Nada de esto es negociable", ha avisado.
"Todos los modelos de cooperación (económica) con terceros países están sobre la mesa. Están disponibles. Estamos abiertos a negociar con Reino Unido. Es Reino Unido el que se está cerrando las puertas", ha recordado, en alusión al acuerdo de libre comercio ofrecido por la UE en el borrador de directrices presentado por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, con las líneas rojas para negociar la relación futura, que se espera que aprueben los líderes europeos en su cumbre de la próxima semana.
Barnier ha recalcado en este sentido que el bloque toma "nota" de "las líneas rojas" del Gobierno británico de salir del mercado interior, de la unión aduanera y de recuperar su autonomía normativa y comercial y dejar de estar vinculado al Tribunal de Justicia de la UE, al tiempo que ha dicho reconocerse en la "arquitectura" propuesta por la Eurocámara de negociar un acuerdo de asociación con Reino Unido, que incluya un acuerdo de libre comercio y la cooperación en otras áreas como policial y judicial en defensa y política exterior, pesca y aviación.
NO HABRÁ MERCADO INTERIOR A LA CARTA
"Evidentemente no podemos querer tener el estatus de un país tercero y pedir al mismo tiempo las ventajas de pertenecer a la Unión. No podremos utilizar el mercado interior a la carta", ha subrayado, dejando claro además que "las cuatro libertades (del mercado interior), incluida la libertad de circulación, son indivisibles e indisociables".
Barnier también ha dejado claro que Reino Unido no podrá participar en agencias de la UE como la de Medicamentos, Seguridad Aérea o Químicos, como ha planteado May, sin aplicar el derecho de la Unión y la jurisdicción del Tribunal de Justicia europeo como tampoco podrá haber "el reconocimiento de normas y estándares mutuos" sin "una ley común, una supervisión coherente y una jurisdicción única", motivo por el cual ha considerado "bastante sorprendente" que Londres piense que los 27 aceptarán "la convergencia" normativa sólo cuando a Reino Unido le interesa y mantener al mismo tiempo "la posibilidad de divergir para obtener una ventaja comparativa", ya sea en materia ambiental o en la reglamentación financiera.
"Esta cuestión es muy importante", ha avisado Barnier, que ha dejado claro que los europeos estarán "muy atentos" para impedir "el riesgo de dumping" desde Reino Unido porque, además, será algo "muy importante" para allanar la ratificación de cualquier acuerdo futuro.
ACUERDO DE RETIRADA ORDENADA, CONDICIÓN PREVIA
Eso sí, el jefe negociador de la UE ha dejado claro que hay que "poner las cosas en el buen orden" y que "para preparar, construir una nueva asociación ambiciosa con Reino Unido, organizar su retirada de manera ordenada más que desordenada es una condición previa", motivo por el cual ha pedido "avances en los próximos días" en asuntos que forman parte del acuerdo de retirada, incluido la gobernanza del mismo y Euratom.
El jefe negociador de la UE ha recordado que la "prioridad" es garantizar los derechos de los europeos acordados en diciembre y ha insistido en que no aceptarán normas "distintas" para los que lleguen después del Brexit hasta el fin del periodo de transición, que la parte europea propone limitar hasta finales de 2020.
También ha subrayado la cuestión prioritaria de evitar la vuelta a "una frontera dura" entre Irlanda e Irlanda del Norte y ha vuelto a defender la opción de crear un área normativa común "en ausencia de otras soluciones y teniendo en cuenta la decisión de Reino Unido de irse del mercado único y la unión aduanera". "Esta solución de dique de contención, estamos listos para sustituirla por otra solución mejor que proponga el Gobierno británico", ha zanjado.