Palacios, participaciones, obras de arte y joyas entre el gran patrimonio de los Franco

La única hija de Francisco Franco, Carmen Franco, deja a sus siete hijos en herencia un patrimonio difícilmente calculable. Los expertos hablan de más de 600 millones de euros repartidos en múltiples propiedades, participaciones en 21 empresas, joyas y obras de arte.

Y aunque siempre negó que fuera tan grande, es cierto que los bienes que obtuvo su padre como Jefe de Estado se revalorizaron en democracia con cifras astronómicas. Sin ir más lejos, la finca de Valdelasfuentes que compraron a finales de los años 50 por dos millones de pesetas, 12.000 euros, y hace unos años vendieron una pequeña parte por 10 millones de euros.

La familia sigue manteniendo el edificio de la calle Hermanos Béquer, una de las más cotizadas de Madrid. También la finca de Valdefuentes, el palacio de Cornide, en A Coruña, valorado en 5,5 millones de euros. O el más polémico: el pazo de Meirás, que, a pesar de los esfuerzos de los Franco por evitarlo, en 2011 se abrió al público tras ser declarado bien de interés cultural.

A esto hay que sumar aparcamientos, viviendas de lujo en Marbella, Miami o Filipinas. Millones y millones de una familia que ha hecho de su patrimonio su fuente de ingresos.