Senador del PP pide no inmiscuirse en la investigación italiana sobre Open Arms y dice que los barcos los financia Soros

El senador del PP Pedro Agramunt ha subrayado este miércoles que España no debe inmiscuirse en la investigación de la Fiscalía italiana sobre el barco de la ONG Proactiva Open Arms, retenido en Sicilia desde el pasado 18 de marzo acusado de colaborar con el tráfico ilegal de personas, porque sería una "injerencia" en un país amigo.

Así lo ha defendido en una sesión de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara en la que, finalmente, se ha aprobado por unanimidad una moción que pide al Gobierno que interceda ante Italia para aclarar la retención del barco, pero no para pedir que se ponga fin a la investigación judicial.

"Decir que las informaciones demuestran que estaba solo en labores humanitarias cuando no solo este barco, sino otros, están siendo investigados por la magistratura sería un atentado a la independencia judicial italiana", ha defendido Agramunt.

Durante el debate, el senador ha afirmado además que, según información que él ha podido obtener de Italia, todos los barcos de las nueve ONG que se han dedicado a salvar migrantes en el Mediterráneo han estado financiados por el filántropo estadounidense George Soros.

Soros, millonario estadounidense de origen húngaro, está en el punto de mira tanto de la Rusia de Vladimir Putin como del Gobierno húngaro de Viktor Orban y del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por las actividades que financia a través de su organización Open Society. Agramunt ha dicho que el filántropo que "se presenta como izquierdista" es en realidad un exponente del "capitalismo más salvaje".

Finalmente, la Comisión ha aprobado por unanimidad una moción en la que insta al Gobierno a interceder ante las autoridades italianas "con el fin de aclarar de inmediato los hechos relacionados con la retención del barco de la ONG Proactiva Open Arms".

El texto, consensuado tras un largo debate entre PSOE y PP, pide también al Ministerio de Asuntos Exteriores que preste "máximo apoyo diplomático y consular" a la ONG y a la tripulación del barco, que está inmovilizado desde el pasado 18 de marzo y acusado de favorecer la inmigración ilegal en el Mediterráneo.

Además, el Senado muestra su "apoyo y solidaridad a las organzaciones humanitarias que se dedican a salvar vidas", considera que todos los países deben hacer los "máximos esfuerzos para evitar cualquier muerte en el tránsito de personas" y anima a los Gobiernos europeos a hacer más operaciones conjuntas de rescate.

EL PSOE ACEPTÓ REBAJAR EL TEXTO PARA L

El texto ha salido adelante después de que el portavoz socialista, Óscar López, haya aceptado rebajar un poco el texto a cambio de lograr el apoyo del Senado para la ONG, un respaldo imposible sin el PP, que tiene mayoría absoluta. Para López, pedir apoyo diplomático no es nada "radical" ni dificultará las relaciones con Italia.

Por su parte, Agramunt se ha avenido a negociar después de que el socialista insistiese en recabar un apoyo unánime de la Cámara y le recordase que él mismo, como presidente de la Comisión Constitucional del Senado, emprendió iniciativas en favor de tres españoles condenados a muerte en Estados Unidos.

Con todo, el senador 'popular' ha distinguido la oposición "de principio" a la pena de muerte de lo que, ha dicho, es una investigación por "colaboración con criminales", que es de lo que se acusa a Open Arms. "Lo importante es esperar a ver qué deciden las autoridades italianas", ha dicho.

Agramunt ha recalcado que se trata de una acusación "muy grave" y ha dicho a los socialistas que a ellos tampoco les gustaría que un país extranjero dijese a sus jueces o a sus fiscales lo que tienen que hacer. "Si finalmente no hay nada aplaudiremos la decisión, pero si lo hay es muy preocupante, tenemos que estar vigilantes", ha dicho.

Durante el debate, la senadora de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea Sara Vilà ha reprochado a los 'populares' que un día alaben la labor de las ONG que rescatan personas en el Mediterráneo y otro día dan las razón a quienes las criminalizan.

Desde ERC, Jordi Martí ha avisado de que el delito que se le imputa a la ONG podría suponerle una multa de 1,5 millones de euros y de que a estas organizaciones cada vez les resulta más difícil trabajar porque "se les ha señalado como parte del problema". De las nueve que operaban allí hace un año, ha dicho, ahora solo queda un barco, el Aquarius de Sos Mediterranée y Médicos sin Fronteras.