ACS construirá una línea de metro en la principal avenida de Toronto por 775 millones

ACS se ha adjudicado el contrato de construcción y posterior mantenimiento de la nueva línea de metro ligero de Toronto, en Canadá, un proyecto estimado en 775 millones de euros, informó el grupo.

La compañía que preside Florentino Pérez se hace con un nuevo 'macroproyecto' de infraestructuras en Norteamérica, su primer mercado, mientras en España está pendiente de la toma conjunta de Abertis con Atlantia.

El contrato logrado ahora supone la construcción de una línea de metro en superficie que discurrirá por la Avenida de Finch de Toronto, la principal arteria de la ciudad y la que presenta mayor congestión de tráfico.

El proyecto supone construir una línea de 11 kilómetros de longitud y 16 paradas en superficie, otra parada más subterránea para conectar con la universidad de Humber y un intercambiador de transporte también subterráneo.

El contrato abarca asimismo la instalación de todos los sistemas necesarios para la operación, construcción de las cocheras y el mantenimiento posterior de la infraestructura y los trenes, que Alstom suministrará a través de un contrato directo con la provincia de Ontario.

El proyecto se enmarca en un plan regional de infraestructuras de transporte de Metrolinx, la agencia pública que se encarga del transporte del área metropolitana de Toronto.

ACS se ha hecho con el proyecto a través de un consorcio que controla al 33% en el caso de las obras de construcción y al 55% en cuanto a las posteriores labores de mantenimiento, y en el que tiene como socios a las firmas locales Aecon y Dufferin/CRH Group Canadá.

Está previsto que las obras comiencen en el tercer trimestre de este año con el fin de que estén listas en la segunda mitad de 2023.

MERCADO ESTRATÉGICO.

La consecución de este proyecto se suma al listado de grandes obras de infraestructuras que ACS ha logrado en Norteamérica en lo que va de año.

Entre estos 'macroproyectos' figura la construcción de sendos sistemas de transporte ferroviario automático, sin conductor, uno en el aeropuerto de Los Ángeles por 1.570 millones de euros y otro para el tráfico metropolitano de Montreal, por otros 3.300 millones, y los trabajos conseguidos justo hace un año en uno de los mayores proyectos hidroeléctricos de la historia de Canadá por otros 1.000 millones.

Estos contratos se suman a la cartera de obras que ACS ya tenía en esta zona, que a cierre de 2017 sumaba 23.896 millones de euros.

Norteamérica es el actual primer mercado de ACS, por delante de Australia, dado que el pasado año reportó al grupo ingresos por 14.669 millones de euros, el 46% del total de la compañía.