España es el tercer país de la Unión Europea con más pobreza laboral: “Trabajo 365 días al año, si no, no me alcanza”

Aprobar la reducción de la jornada laboral y reforzar la indemnización por despido son las principales reivindicaciones de este 1 de mayo
En España doce de cien trabajadores son pobres a pesar de tener trabajo
España vs. Europa: ¿cuántas horas se trabajan realmente cada semana?
Este jueves, 1 de mayo, se celebra el Día Internacional de los Trabajadores y es una jornada de reivindicaciones laborales en todo el mundo. Aprobar la reducción de la jornada laboral y reforzar la indemnización por despido, además de proteger lo ya conseguido, son las principales reivindicaciones de este primero de mayo en el que además hemos conocido un dato preocupante: casi doce de cada cien trabajadores son pobres a pesar de tener empleo.
En este día del trabajador se celebran manifestaciones en toda España convocadas por por los sindicatos. Marchas que tienen como principales reivindicaciones: recortar la jornada laborar a las 37 horas y media y reformar el despido.
La marcha principal ha sido la de Madrid, con los líderes sindicales a la cabeza. Comisiones Obreras y UGT dicen que este 1 de Mayo tiene las mayores connotaciones internacionales de la historia. Piden hacer frente en la calle a lo que ellos llaman "la internacional del odio" encabezada por Donald Trump.
En este día del trabajador, además, hemos conocido un dato preocupante: España es el tercer país de la Unión Europea con más pobreza laboral, a pesar del crecimiento económico y la subida del salario mínimo, según datos recogido por Oxfam Intermón.
"En los últimos años se han logrado grandes avances con la reforma laboral y las subidas del salario mínimo interprofesional, pero sigue habiendo millones de personas trabajadoras en pobreza laboral con las que se tiene aún una deuda pendiente", explica el responsable de protección social y empleo de Oxfam Intermón, Alejandro García-Gil.
El 11,6% de los trabajadores siguen siendo pobres a pesar de tener trabajo. De todos ellos, el 30% son inmigrantes, trabajadores extracomunitarios, tres veces más que las personas nacidas en España.
El nivel educativo es otro de los factores explicativos: la pobreza laboral es del 19,2% entre las personas trabajadoras que tienen educación primaria, y baja al 5,7% entre quienes tienen educación superior.
Los autónomos, los más castigados
Dentro de los trabajadores que sufren esta pobreza laboral, los autónomos son los más castigados. Uno de cada cuatro trabaja y no consiguen llegar a fin de mes. Entre los trabajadores a tiempo parcial, la tasa de pobreza laboral duplica a la de aquellos que trabajan a jornada completa.
Detrás de estos números hay rostros de trabajadores que sufren esta situación. En España hay 21.823.000 trabajadores de los que 2’5 millones, un 11’6%, sufren pobreza laboral o, lo que es lo mismo, personas que aunque tienen un empleo no llegan a fin de mes.
Durante la manifestación del día del trabajador tomamos el pulso a la calle para comprobar que opina la gente de esta situación. Para algunos es “parte del sistema”, para otros es necesario “mejorar la situación económica” de los más jóvenes. La pregunta que se hace la gente es “¿cómo lo arreglamos?”
Los que más lo sufren son los trabajadores a tiempo parcial, los autónomos y, sobre todo, los inmigrantes, que tienen tres veces más posibilidades de tener un trabajo, pero no llevar una vida digna.
La historia de María: "Trabajo los siete días a la semana"
Durante la manifestación por el día del trabajador, nos es difícil encontrar esos perfiles. En la calle, de cada 100 personas que nos cruzamos, según los datos, 11 sufren pobreza laboral. Entonces encontramos a María, ella sabe bien de lo que estamos hablando. Ella nos confiesa que “es difícil saber exactamente, tener la fórmula exacta para saberlo”, pero apunta a una parte del problema, “aquí, como inmigrante, uno no puede trabajar en lo que ha hecho en su país”. Ella es enfermera y en España trabaja “limpiando casas y lo que se presente”.
“Trabajo los siente días a la semana, 365 días al año, esté enferma o no lo esté, tengo que estar ahí porque si no, no me alcanza el dinero”. Por eso hoy, para María, no es festivo, trabaja como siempre para sacar adelante a sus tres hijos.
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