En la Noche Europea sin Accidentes de Tráfico se han realizado unos 600 controles de alcoholemia por toda España. Pero el alcohol no es el único problema. También se controla la velocidad. Cada vez más conductores son conscientes de que alcohol y coche no son compatibles. Esa es la esperanza de las autoridades. Sobre todo que no bebamos si vamos a coger el coche. Que cunda el ejemplo.