'Adiós' a los temblores provocados por el párkinson gracias a un estimulador cerebral

Con solo apretar un botón y acercar un control remoto al pecho, en cuestión de segundos William deja de padecer los temblores que desde hace 12 años sufre debido a la enfermedad del Parkinson. Todo gracias a un dispositivo que lleva implantado; un estimulador cerebral profundo; como un marcapasos pero instalado en el cerebro.

Parece magia, pero es ciencia. “Consigue silenciar una actividad anormal del cerebro que se manifiesta como temblor, entre otras cosas”, explican los médicos.

El estimulador posibilita que William se quede quieto, que estire los brazos y queden prácticamente inmóviles. Y como él, muchos pacientes experimentan sus efectos positivos.

El inconveniente es que esta estimulación no puede acompañarles todo el tiempo. “Existen unas baterías que funcionan aproximadamente como un móvil; hay que recargarlas cada dos tres días”, indican.

En España, la Seguridad Social cubre el coste, que asciende a 20.000 euros. En casos como el de Williams el control del temblor ha sido absoluto, aunque normalmente suele ser del 50%. Siete meses después de implantarle el estimulador, ha conseguido hacer cosas que desde hace mucho tiempo consideraba ya impensables.