La célula de Tarragona preparaba atentados de mayor alcance

Los atentados responden a acciones coordinadas por una célula organizada por al menos 12 personas con relaciones de parentesco, según la investigación abierta por la policía y los Mossos. La primera pista lleva a los agentes a la casa de Alcanar, al sur de Tarragona, donde estarían preparando los explosivos cuando se produjo una gran deflagración el miércoles por la noche. Esa explosión acabó con al menos un terrorista muerto y otro herido en el hospital, imprevistos que han frustrado un atentado de mayor alcance, según el Jefe de los Mossos, que tienen indicios de que pretendían atentar con explosivos. Tras la explosión, los terroristas aceleraron sus planes. Al menos uno de ellos se trasladó a Barcelona, donde 16 horas después, antes de las cinco de la tarde de ayer, irrumpió con la furgoneta blanca en Las Ramblas atropellando a más de un centenar de personas. Siete horas después, cinco terroristas se saltaban un control policial en el municipio costero de Cambrils, Tarragona, arrollando a los peatones y apuñalando a una mujer. Los cinco fueron abatidos. En total, los agentes investigan a al menos una docena de implicados en los atentados, todos muy jóvenes, muy coordinados y sin antecentes por terrorismo. Se habrían movido en un radio de 300 kilómetros, ya que la mayoría residían en Ripoll, cerca del Pirineo catalán, donde esta tarde se han llevado a cabo registros.