Ana Huete y Christian regentaban una pizzeria en el centro de Granada. Era la tercera vez que la joven viajaba a Italia para visitar a la familia de su novio. Ella dormía en la parte de abajo de la vivienda y él en la de arriba cuando el suelo tembló. La mala suerte quiso que una viga acabara con su vida. Los padres de Ana viajan mañana a la zona para encargarse de la repatriación del cadáver.