María ha abierto su corazón y ha explicado a los pretendientes que el programa le ha ayudado a superar algunos de sus miedos. La tronista ha tenido una infancia un poco distinta y tuvo que estar separada de su madre durante un tiempo. Por eso, cuando pudo reencontrarse con ella, le surgió la necesidad de estar todo el rato con ella y no era capaz de separarse de ella. Ha contado que incluso llegaba a simular mareos en el colegio para poder irse a casa con ella. La primera vez que María se separó de su Madre más tiempo fue cuando cogió el Ave para venir al programa a conocer a Noel.