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Nico tenía claro que él no iba a hablar por hablar en el plató y que mucho menos iba a opinar sobre la relación de su tronista con Abel porque no había sido testigo, pero no se iba a quedar callado sabiendo lo que sabía. El pretendiente no dudó en confesarle a Mamen que consideraba que Iván estaba haciendo un papel, ya que cuando llegó le confesó que estaba casi enamorado de Laura. La tronista no se lo podía creer pero le agradeció su sinceridad y minutos después salió de dudas. Mamen confía en Iván y llegó a pensar que se trataba de una estrategia de Nico para quitarse a un fuerte rival.









