Fanny ha empezado el programa reconociendo que ha pensado mucho en sus pretendientes durante estos días. Parece que poco a poco se va olvidando de Vicente y está siendo fiel a su promesa de zanjar el tema y centrarse en sus chicos.

Y empezando por las novedades de sus tronistas, después de la última cita, en la que se ha notado que su relación no va a llegar a cuajar, Carlos ha decidido ser sincero con Fanny e irse del programa porque se ha enamorado fuera.

Pero ha sido cuando Virginia ha comentado que nota que a Fanny y a Indhira les pasa algo, cuando la valenciana ha reconocido que le cuesta hablar en público, y que está muy nerviosa, que no lleva bien las críticas, y le molesta lo que dice la gente, especialmente por parte de Iván. Vicente ha bajado a apoyarla. No ha podido evitar emocionarse al sincerarse y contar que se siente sola.

Madrazo se ha lanzado y ha contado que ha estado investigando y ha descubierto que Fanny estuvo en tres programas de televisión. Según él se ha vendido, y está intentando engañar a todos. “A mi la televisión me gusta, por eso me presenté a Gran Hermano, y a los programas a los que he ido son concursos, en los que he podido ganar dinero para irme de viaje”, se ha defendido ella.

El ex Gran Hermano le ha recordado que el primer día ella dijo que le asustaban las cámaras, y por eso dudaba si se quedaba o no, y sin embargo ahora está diciendo que le gusta la televisión. Fanny se ha alterado, y ha contado que el día del casting estaba con sumida en una gran depresión, y no era ella, y ha terminado soltando las lágrimas.

Ella asegura que ha superado lo de Vicente, pero el público duda que esté diciendo la verdad. Sin embargo, sus pretendientes le han estado apoyando. Juan Carlos le ha querido dar un abrazo, y David le ha aconsejado que pase de las críticas de los foros, y sobre todo de los ganchos, que tienen que estar ahí para opinar, no para juzgar a nadie.

Pedro, que no sólo cambió de bando, terminando en el de Indhira, si no que también ha cambiado de nombre, y ahora se llama Reche, se va lanzando poco a poco, y hoy ha querido mostrar su ingenio pidiéndole una cita a Indhira a través de su carta a los Reyes Magos. Como estamos de rebajas, ha conseguido una mini-cita con ella en la mini-mesa camilla.

El asturiano ha dejado claro que ya no va a cambiar de bando, o está por ella, o se va del programa . Y no le tiene miedo a Víctor porque, como ha dicho, “aunque tenga más terreno ganado no es ningún problema”.

La tronista ha explicado por qué decidió volver a rescatarle para que se quedase entre sus filas: “Lo miraba y me destacaba entre el grupo, porque ellos no son mi estilo, y él sí”.

Indhira ha tenido hoy una visita muy especial . Al igual que el día de su estreno en el trono, Arturo ha querido ir a verla, para comprobar qué tal se le está dando su búsqueda del amor. El delfín ha reconocido que no sigue el programa, pero le ha dicho a la malagueña que en lo poco que ha visto la ha notado muy divertida.

De lo que sí que se había enterado es de que Víctor había avanzado posiciones , y no le ha hecho demasiada gracia. El pretendiente le ha querido decir que “lo que se ha perdido con Indhira no tiene perdón de Dios”.

Después del encuentro con él, en la que Indhira le ha dicho a Víctor que olía muy bien, Juan Carlos, haciendo una vez más gala de su humor, ha lanzado una confidencia: “¡La colonia se la presté yo!”.

Tras ver la cita, Arturo ha opinado que Indhira está muy insegura, y que ella cambiaba de tema constantemente para enfriar un poco la situación. Ha seguido criticando a Víctor, hasta que Indhira no ha podido más y se ha levantado para poner las cosas en su sitio.

“Estoy harta de que Arturo, cada vez que va a un programa diga que nunca sitió nada por mí, nunca me prometió nada, nunca me dijo que me quería. Hay muchas formas de demostrar las cosas”, le ha dicho, y él ha contestado que sí que ha sentido algo por ella, pero nunca le prometió nada. Lo que ella no quiere es que le dejen como la obsesionada que veía cosas que no había, y para él era un rollo y punto.

Ha quedado demostrado que estos dos todavía tienen muchos trapos sucios que sacarse, muchas cosas que aclarar, y los pretendientes de Indhira también han podido corroborarlo, a juzgar por las caras de cromo que se les ha quedado después de ser espectadores de lujo en esta discursión.