En Plasencia, La Rebe, decidida a fugarse con su amor subirá a lomos de un coche de línea para emprender un viaje través de la meseta castellana. En el autobús, entre ensoñaciones y cortinas de poliéster, planeará su nueva vida con José. Ajenos a la marcha de su hija, Los Jiménez viajarán a la capital para comprar telas. A su vuelta, descubrirán que la Reina del Mercadillo se ha marchado.
Los Fernández están decididos a introducirse en la industria musical. Después de una intensa tormenta de ideas y alguna que otra borrasca creativa, Joaquín y Mariano darán a luz a un estilo musical sin precedentes. Se reunirán con el productor musical Leonardo Dantés, aunque no llegarán a buen puerto. Decidirán entonces confiar su nueva creación a dos compositores amigos de Mariano que conseguirán sacar a delante la propuesta. Con tintes de flamenco y una buena dosis de reggaetón surgirá el ‘Gipsytón’, una más que sólida aspirante a canción del verano.
Intentando no despeinarse, Las Salazar pisarán el acelerador de su descapotable para llegar cuanto antes a Los Ángeles. Ya en la ciudad de las estrellas, llamarán a sus maridos para confesarles todas sus mentiras. Aprovecharán también para empaparse del glamour de Beverly Hills e intentar buscar a sus idolatradas Kardashian. Sus esfuerzos caerán en saco roto, aunque en el proceso se encontrarán con una celebrity nacional que acudió a la meca del cine para perfeccionar sus habilidades interpretativas: Sonia Monroy. La actriz prometerá utilizar sus conocimientos del show-business para encontrar al clan más buscado de Hollywood.
Por último, Los Contreras ultimarán los detalles para la presentación de la firma de moda de Cristo en Madrid. Tras descubrir la identidad de su admirador secreto, Cristo saboreará las mieles del éxito en su primer desfile en una galería de arte. Además, recibirá una propuesta inigualable por parte del dueño: un viaje a Nueva York para presentar sus diseños.