“La administración local ha sido una de las que ha pagado las políticas de austeridad o de recortes”, decía Martiño Noriega ante la posibilidad de que se pidan nuevos recortes a los Ayuntamientos. Como alcalde de Santiago, apuntaba que durante los últimos cuatro o cinco años se ha sufrido “un ERE encubierto” dado que no se han podido cubrir bajas o jubilaciones y añadía que si esta situación no cambia “este ayuntamiento y muchos otros estarán condenados a la extinción”.