Alejandra Andrade se reúne con uno de los proxenetas que maneja la prostitución de alto standing en Madrid, en el negocio todo el mundo le conoce como ‘El Padrino’. Este proxeneta organiza grandes fiestas con modelos de agencia para clientes muy ricos. ‘El Padrino’ es un conseguidor, se encarga de proporcionar casas, chicas, bebidas y droga… todo de alto standing.
“Estuve trabajando en la hostelería pero cuando vi que me estaban saliendo callos en las manos pensé que eso no era para mí”, asegura con cierta sorna. “Hay muchas chicas en este negocio, cuando empieza a gustarte la pasta, ya es difícil dar marcha atrás”, continua. “Las modelos ganan 5.000 euros 24 horas y eso no implica nada. Si luego ya aceptan alguna propuesta del cliente, eso ya es dinero extra”, explica.
“Lo que gano yo depende mucho. Una noche llegué a sacarme 30.000 euros”, asevera. “No considero que esté haciendo nada malo, yo le hago bien, le doy dinero que se gana fácil. Es fácil porque baila, bebe y se pone de coca… yo lo haría. No me considero un proxeneta, yo no les exijo dinero, me lo regalan…”, se intenta justificar.