Un soltero rompe su timidez en ‘First Dates’: “Soy un lobo con piel de cordero y en el cuarto me quito la piel y soy un animal”

Rubén ha entrado en ‘First Dates’ con seguridad y decisión. Sin embargo, nos ha contado que es un poco tímido de primeras y que le cuesta sacar conversación con la gente porque tiene gustos fuera de lo común. Le encantan los videojuegos y es el vicepresidente de una asociación de manga y, además, hace teatro manga. En el amor también es un poquito tímido, pero luego se suelta y en el tema sexual le gusta experimentar.

Sara, su cita, también es una chica introvertida y le cuesta abrirse a la gente. A Rubén le ha gustado mucho al verla “me ha parecido una chica muy elegante y atractiva”. Nada más empezar a conocerse, le ha dicho que trabajaba en una fábrica de automoción, pero que hacía teatro manga y eso a ella le ha gustado mucho porque a ella también le gustan “a mí me encanta”.

La soltera le ha contado que también le gustaba mucho el manga, pero se ha comenzado a poner nerviosa y le ha dicho que no sabía muy bien qué decirle porque era muy tímida. Sara le ha confesado que solo había estado en Zaragoza de pasada y el soltero no ha dudado en invitarla a las Fiestas del Pilar. También ha querido saber si ella estaba dispuesta a cambiar de ciudad y la soltera le ha dicho que, si el trabajo se lo permite, no le importaría “no estoy anclada en mi pueblo”.

Entre silencio y silencio, los solteros han intentado romper la timidez y se han ido descubriendo. Rubén le ha confesado que era celoso, pero que era consciente que era un tema de inseguridad personal y que vivía los celos en silencio. En el tema de los hijos, los dos han tenido claro que querían ser padres, pero que todavía no había llegado su momento.

Aprovechando que Sara era más tímida que él, Rubén ha querido saber qué cinco cosas la ponían contenta y ella le ha contado que lo que más le gustaba era la música. Rubén no estaba seguro de que le hubiera gustado a su cita, pero tampoco tenía ningún dato claro de que no hubiera sido así y no ha querido perder la esperanza.

Rubén ha querido saber cómo era Sara en el tema sexual y ella le ha dicho que era versátil, algo que le ha gustado porque él suele ser más dominante “soy un lobo con piel de cordero, dentro del cuarto me quito la piel y soy un animal”. Superado el momento, los jóvenes se han sincerado y se han dicho que habían estado muy cómodos y que querían repetir. Rubén ha pagado la cena y ella ha querido pagar unas copas fuera del restaurante acto seguido.