Blanca Montserrat ha llegado a ‘First Dates’ asegurando que los hombres se fijan en lo que ven, pero que ella se viste con muy poquita ropa porque le gusta gustar. Asegura haberse inspirado en las muñequitas Bratz “botitas, mucho corsé…”. En el amor no le ha ido muy bien porque suelen ser muy celoso. Le gustan los hombres mayores y gorditos a los que les guste compartir con ella una buena comida o un buen trago “un hombre sin barriga es como un cielo sin estrellas”.
Manuel, su cita, viaja en su autocaravana vendiendo comida italiana. Le encanta ir de un lado para otro, las mujeres y ponerlas cachondas “me quito la camiseta y las pongo a mis pechos”. Al verle, Blanca ha sentido que tenía un cuerpo gordito como a ella le gusta y él se ha quedado impresionado con su sujetador “bien apretado, madre mía”. Manuel nunca ha estado con una paraguaya, pero parece que su cita con Blanca ha comenzado bien, muy bien.
En la mesa, Manuel ha querido saber a qué se dedicaba su cita y ella le ha contado que era maquilladora, pero que soñaba con tener su propio salón de estética. Él le ha contado que tenía un puesto ambulante de comida italiana y eso ha marcado un antes y un después en la cita “no podría estar con un hombre que se dedica a eso, no tiene ambición”.
Montserrat le ha dicho que una vez se enamoró de un chico del barrio, pero que suele necesitar que le paguen viajes y le hagan regalos caros para enamorarse. Él sin embargo, se conforma con una chica con “una buenas tetas”. Respecto al sitio más raro en el que ha tenido sexo, Manuel le ha dicho que lo había hecho en muchos sitios, la playa, la lavadora, sobre la mesa…
Manuel ha querido saber cómo le gustaban los hombres a su cita y ella le ha contado que le gustaban mayores, canosos y con barriga. A el soltero también le gustan las chicas mayores y no ha visto en su cita lo que buscaba “es muy pequeña, pero tiene las tetas grandes”. Montserrat no se ha cortado un pelo y al saber que el padre de Manuel estaba soltero le ha preguntado cómo era y ha visto posibilidades de que fuera perfecto para ella “podemos ser compatibles”.