El sexo loco de un soltero de ‘First Dates’: “Lo he llegado a hacer en la cocina y con mi suegro en el salón”
Joaquín gana puntos con Marisa: “No soy chef, pero me gusta cocinar”
Carlos Sobera advierte a Marisa de los encantos de Matías: “No te enamores”
A Marisa en su casa la llaman McGyver porque lo arregla todo y hace una comida de aprovechamiento con la que te chupas los dedos. Al entrar en ‘First Dates’, Carlos Sobera le ha dicho que tuviera cuidado con el rubio que era muy peligroso “No te enamores”, refiriéndose a Matías, pero ella le ha dejado K.O. con un “vengo especialmente por ti”. El presentador ha sonreído y le ha dicho que él también era peligroso.
Marisa se ha casado y divorciado dos veces, está cansado de mentirosos y graciosos que tienen la gracia en los pies. No se volvería a casar y busca a una pareja para compartir los días libres, pero cada uno en su casa “yo ya no estoy para poner la mesa, lavar calzoncillos o escuchar ronquidos”. Busca un poquito más alto que ella y que se haya vestido para la ocasión.
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Joaquín, su cita, ha sido un cabeza loca de joven y es que, es un hombre al que no le da vergüenza nada y se atreve con todo. Ha estado 40 años con su mujer y ha llegado muy nervioso “no tengo ni idea de cómo se liga”. Marisa le ha notado muy nervioso y ha tomado las riendas de la cita. Los dos son de Madrid y al saber que él había sido decorador le ha dicho que a ella ese mundo también le gustaba. A Joaquín, Marisa le ha parecido una mujer bellísima, pero ella ha sentido que él no era su tipo.
Marisa ha querido conocer más cosas de Joaquín y se ha ido encontrando con puntos muy positivos de su cita. Le ha gustado mucho que bailara bachata, que fuera un buen cocinero y que le apasionara viajar. Ha ido por lo menos 20 veces a la zona del Caribe y Marisa lo ha tenido claro “yo ninguna, me lo tendrá que enseñar”.
La soltera le ha contado a su cita que buscaba a alguien con quien estar a gusto y sobre todo, a alguien positivo. Eso sí, le ha dicho que no quería entrar en detalles sexuales, pero que sí era algo importante saber. Joaquín se ha mostrado prudente y le ha dicho que él había estado 40 años haciendo el amor, pero que si había que innovar y un aquí te pillo y aquí te mato, no tenía problemas “lo he hecho en la cocina con mi suegro en el salón y en una zodiac que te llevan las olas hasta la orilla”.
Antes de la decisión final, los solteros se han confesado que se estaban gustando y que se lo estaban pasando estupendamente, algo que han corroborado al confirmar que querían repetir.