Carlos Sobera alucina con la autoestima de Matías en ‘First Dates’: “Un modelo de generosidad”

José es un hombre Apple, lleva la manzanita tatuada en la muñeca y asegura que su gran sueño en esta vida sería trabajar en la empresa informática. Busca a una mujer cariñosa, compañera y con la que poderse tomar un buen mate. No le gustan las mujeres que tiene la manicura descuidada y como buen exmodelo, le gusta cuidarse muchísimo, y espera que su pareja también lo haga.

De hecho, al ver de cerca el imponente físico y la belleza de Matías, ha tenido claro que también podía ser un buen modelo. Carlos Sobera le ha explicado que había sido modelo y que ahora también lo era “Actitud y rectitud”. Matías que había bromeado con ser “un modelo fracaso”, ha puntualizado que él también era “modelo de generosidad” y el presentador ha alucinado.

Lorena, su cita, es una mujer de carácter fuerte que tiene mucho genio. Le gusta ir al gimnasio y le encanta ir al cine. Al verla, José le ha puesto un diez, le ha gustado mucho su cara y su físico súper trabajado. Aunque un poco nerviosos, se han puesto a hablar sobre sus lugares de procedencia y han descubierto que los dos son unos recién llegados a Madrid. Él es argentino y ella colombiana.

El soltera estaba impresionada con la belleza de su cita y le ha costado hasta creer que era un poquito más mayor que él. Lorena le ha contado que ella no creía en el amor a primera vista y que estaba buscando una amistad que luego pudiera evolucionar, pero que ahora la gente solo quería sexo y eso no iba con ella.

Lorena es una mujer a la que no le gusta mucho la rumba y es más de ir al cine o a pasear, planes que a José le estaban pareciendo estupendos. En el tema sexual parece que también han coincidido porque los dos son muy activos y él ha sentido que ya tenían un 70% de la relación hecha.

José le ha confesado a Lorena que él se cuida mucho que había sido modelo que tenía la famosa tableta metida en la barriga. Hace unos 800 abdominales diarios y se ha mostrado dispuesto a entrenarla, pero ella, que también se cuida mucho, le ha confesado que también tenía el carné de entrenadora personal. 

José estaba encantado con Lorena, pero al saber que a ella le encantaba la lencería y los disfraces eróticos, se ha terminado de enamorar. No podía creer que a ella le gustaran las mismas cosas que a él y ha sentido que se iban a sorprender, pero ella no estaba tan convencida porque una cosa con las palabras y otra los hechos “con la palabra se puede pilotar un avión, pero luego hay que manejarlo”.

En el momento de la decisión final, José ha asegurado que le gustaría seguir descubriendo que más cosas esconde una mujer tan callada y seria como Lorena, y ella le ha correspondido. Le ha gustado que él también se cuide y no sea un hombre que solo exige a la mujer que esté linda.