José, al saber que a su cita de ‘First Dates’ le gustan los tríos: “No quiero luchas de espadas”

  • José acepta, pero no comparte el concepto de relación abierta de Irina: “Para mí es más una amistad”

  • Irina no come comida saludable: “Este culo está hecho a base de bollycaos”

  • A Irina le da vergüenza robarle un beso a su cita en ‘First Dates’: “Es una cobra sutil”

Irina ha venido a ‘First Dates’ en busca de un hombre con una mentalidad muy abierta y que compartiera su concepto de relación estable. Su cita no parecía tener ninguna de esas características, pero le ha gustado y ha querido repetir. Eso sí, parece que un trío con otro chico no van a hacer.

Irina asegura ligar mucho, pero no encontrar a nadie que le atraiga de verdad. Tiene aplicaciones, pero ya se ha aburrido de todo porque no encuentra a nadie que tenga una mentalidad tan abierta cómo la suya. Está buscando una relación abierta y le da igual que sea con un chico o con una chica, pero asegura que las chicas no le suelen tirar la caña y ha estado con más chicos. Los chicos le gustan rubitos y de ojos azules “rollito surfero” y las chicas le da igual porque le gustan muy distintas “Mientras no sean tipo chonis, no me gusta la gente que va en chándal”.

José, su cita, tiene un físico que no va con su personalidad y le suele etiquetar de “chulete, flipadillo…”.  Al verse, los dos se han gustado mucho y han comenzado su cita con mucha ilusión. Ella ha querido saber si José era de origen español  y él le ha contado que sí, pero que era tan moreno porque se daba rayos uva. Sufre psoriasis y le va muy bien para tenerla controlado.

Carlos Sobera les ha visto tan animados, que no ha dudado en ir a buscarles y llevarles a la mesa 4 “entiendo que os gusta, a mí me recuerda los patos”, les ha dicho despertando su curiosidad.

Sentados en la mesa, Irina ha querido saber si a José le gustaba viajar y él le ha dicho que sí, pero que no había viajado mucho porque no tenía compañía. Ella le ha contado que viaja sola y ha aprovechado para explicarle su concepto de relación abierta. Él lo ha visto muy respetable, pero para él eso sería una amistad, no una relación con respeto mutuo.

Ella ha querido saber si haría un trío con ella y otra chica, y él se ha mostrado encantado, pero al decirle que también se lo podía proponer con un chico y él ha tenido claro que eso no lo haría “No vaya a ser que tengamos un choque, lucha de espadas, no, por favor”. Un razonamiento que a Irina le ha hecho sentir que su cita era muy poco liberal y que no sabía si iban a poder congeniar.

Al saber que a José le gustaban los animales, Irina ha respirado tranquila porque ella tiene un perro al que considera el hombre de su vida “duermo con él, le doy besito al despertar” y no se fía de la gente que no ama a los animales. Pero lo que más le ha gustado de su cita, ha sido que sepa cocinar. Ella no suele comer mucha carne porque su madre es vegetariana y él le ha dicho que no pasaba nada porque a él se le daba muy bien al cocina.

Eso sí, ella parece que de comida saludable no es “este culo está hecho a base de bollycaos”. Algo que a José no ha parecido importarle “estará dulce, entonces”. La cita estaba funcionando muy bien y en la intimidad del reservado parecía que la cosa iba a ir a más, pero la timidez se ha apoderado de la situación. A ella le ha tocado robarle un beso a su cita, pero no se ha atrevido y le ha hecho “una cobra sutil”.

José tenía la sensación de que Irina se iba a lanzar y ha querido tantearla. Eso sí, respecto a las cosas que les habían gustado mutuamente, han sido muy sinceros. A él le ha gustado la sonrisa y los ojos de Irina y a ella, él le ha parecido un chico guapo, simpático y sobre todo, buena persona.

En el momento de la decisión final, ambos han tenido claro que querían repetir la cita y seguirse conociendo, pero él le ha dicho que tenían que hablar sobre el tema de las relaciones abiertas porque él lo ve más como una amistad. Ella lo ha entendido y le ha dicho que se siguieran conociendo y ya verían los puntos que les iban separando.