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Jemimá se ha definido como una mujer seca y rancia, pero a José María, su cita en ‘First Dates’, le ha parecido maravillosa. Ella ha estado a punto de salir corriendo al verle el flequillo en modo cortinilla, pero al saber que tenía un chalet, se lo ha pensado mejor.
Jemimá, una andaluza monísima y ‘cordosiesa’, se lo ha puesto difícil a Carlos Sobera para pronunciar su nombre, pero rápidamente se ha soltado “Soy de respuestas secas y quién me conoce sabe que no suelo ser así, pero tengo fama de rancia “en todos los aspectos de mi vida”. No le gustan mucho los hombres rubios y prefiere que su pareja no sea calvo porque ella es más del pelo que cae que del que no cae.
Al ver a José María, su cita en ‘First Dates’, ha sido muy, muy clara “me hubiera dado la vuelta otra vez, para no verlo”. Le ha entrado un ataque de risa con el flequillo del joven de Castellón, pero se lo ha pensado un poquito mejor al saber que tenía un chalet a ciento cincuenta metros de la playa.
José María le ha explicado a Jemimá el secreto de su eterno moreno y le ha confesado que era agricultor, algo que ella se había imaginado. También le ha vendido las maravillas de su tierra y a ella le ha gustado mucho saber que tenían un río navegable subterráneo “Con la oscuridad no se le ve la cortinilla”. Físicamente no le ha vuelto loca, pero Jemimá ha sentido que José María le podía hacer el apaño.
A Jemimá le ha asustado un poco que José María le dijera que su vida sentimental había sido “inexistente”, podía ser porque fuera un picaflor o porque fuera inaguantable. Él le ha explicado que siempre había sido “el amigo” porque para dar el paso necesitaba conocer muy bien a la chica.
José María ha querido saber por qué había venido al programa y ella le ha contado que había sido un deseo de su hija. Él estaba encantado y no podía pedirle más a su cita “esa una chica maravillosa”. El soltero ha sido muy sincero con ella y ha llegado a la decisión final con la sensación de que una vez más se iba a quedar “en el amigo”, pero ella ha tenido la sensación de que no hay nada que no puede arreglar un buen peluquero.
José María le ha dicho que sí a una cita y ella le ha respondido con un “hay que darle una segunda oportunidad a ese flequillo”, algo que el redactor le ha pedido que le explicara al soltero de Castellón. Ella no se ha cortado y le ha dicho que se iba a encargar de darle un cambio a su look.