Si los ingredientes de un producto no se corresponden con el nombre del producto en su etiquetado estaríamos ante un fraude y un engaño hacia el consumidor, así lo ha confirmado Enrique García, portavoz de la OCU. Esto sucedería con el pan integral, ya que la mayoría de las etiquetas lo denominan así, pero en mayoría de los casos no contiene harina integral, por lo que no estaríamos consumiendo lo que creemos que hemos comprado, algo que podría ser incluso denunciable.