Carne de buey, 'En el punto de mira' destapa el fraude: no hay oferta

cuatro.com 05/04/2017 00:28

¿Es realmente buey la carne que compramos como tal? ‘En el punto de mira’ ha querido comprobarlo y para ello, primero hemos mirado en el BOE la definición de buey: “macho castrado mayor de 48 meses”. En segundo lugar, hemos cogido tres muestras de carne que venden como buey en tres establecimientos diferentes: un restaurante, una carnicería de barrio y un gran supermercado. Por último hemos mandado esas muestras a un laboratorio y los resultados han concluidos que las tres muestras son carne de vaca, ninguna de las tres es de buey y es que el 80% de lo que nos venden como carne de buey no lo es.

La carne de buey está de moda en España pero solo en dos de cada 10 establecimientos se vende buey español verdadero, ¿por qué? ‘En el punto de mira’ viajamos hasta Galicia, la cuna del buey español para hablar con uno de los pocos expertos que trabaja con auténticos bueyes, Pepe Cochón. Este tratante de ganado nos explica que en Galicia hay alrededor de unos 150 bueyes, pero ¿por que haya tan pocos? Un ganadero de la zona nos explica qué tener bueyes no es rentable: “Cuesta más de 8.000 euros mantenerlos y cuando los vendo, recibo lo que gasté. Si fuera rentable habría bueyes como ganaderías de leche”. La escasez de estos animales es la primera causa del fraude del buey.

¿Dónde empieza el fraude de la carne de buey? El equipo de ‘En el punto de mira’ ha comprobado que en las ganaderías y en los mataderos todo se hace de forma correcta. El siguiente paso son las grandes distribuidores como Mercamadrid. Entramos en una de sus cámaras frigoríficas y uno de los empresarios nos muestra lo fácil que es cambiar una etiqueta para convertir vaca vieja en buey. La etiqueta es lo que diferencia a una animal de otro y su cambio es así de fácil.

El equipo de ‘En el punto de mira’ contactó con la web ‘carnedebuey.es’ para hacer una entrevista y desde la empresa nos confirmaron que no vendían carne de buey pese a que así lo anunciaban en su web. Poco después cambiaron el nombre de sus productos y en vez de buey pusieron carne. Incluso después de la grabación del programa, el nombre de la web cambió por ‘carnesrojas.es’. En nuestra visita a la empresa uno de los administradores nos reconoció que el nombre estaba mal y que lo cambiarían en menos de un mes. Su fundador se excusó afirmando que en los años 90 a la carne de vacuno mayor (lo que ellos venden) se le llamaba buey.

Pero recuerda, un auténtico chuletón de buey oscila entre los 80 y 200 euros en un restaurante, así que no te dejes engañar y qué no te den vaca por buey.