Una vecina, harta de los okupas conflictivos de un restaurante en Delicias, Madrid: ''La policía me ha dicho que se han empadronado en el local''
Más de 10 hombres ocuparon hace un año un restaurante en Delicias, Madrid
Los vecinos aseguran que soportan peleas, algunas con armas blancas, mucho ruidos y también suciedad
La Policía les ha contado que los okupas se han empadronado en el local
Un barrio entero está sumido en el caos debido a unos okupas del centro de Madrid, en concreto el barrio de Delicias. Los vecinos describen una situación insostenible: peleas entre ellos con armas blancas, chicos haciendo pis en parques infantiles… Denuncian que no solo han okupado un restaurante si no que se han hecho con el barrio entero.
‘En boca de todos’ se ha trasladado hasta Delicias, en Madrid y ha conseguido hablar con Judit, una vecina que afirma que desde hace más de un año tienen que soportar la convivencia con los okupas conflictivos.
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‘’Han venido los bomberos, un día tuvimos un incendio, la policía viene tanto la nacional como la de la comunidad, ósea es solo coger el teléfono, llamar y decir mezquite 2, esto es el cachondeo padre porque ya saben dónde tienen que venir’’, comienza explicando la vecina que está harta de la situación.
La vecina nos cuenta que una noche tuvo que acudir el SAMUR debido a que uno de los okupas recibió un cuchillazo por parte de otro y explica que se vende droga y que llaman siempre sobre las tres y las cuatro de la madrugada.
‘’La policía me dice que no se puede hacer nada porque es su casa y ellos mismos me dijeron que están empadronados aquí. El colmo es la carta que recibimos ayer todos lo vecinos (…) Ayer como esto está saliendo en los medios, nos dijeron que ellos mismo, los okupas, habían recurrido a la demanda’’, indica muy molesta Judit.
Nacho Abad ha querido saber si los okupas amenazan o intimidan a los vecinos:’’ Yo tengo un niño y le paran y le dicen ‘Hola vecino’, yo cada vez que me lo dice mi niño porque ha bajado con los perros a pasear o algo que ellos están ya hablando con él... O el otro día en la puerta del supermercado que lo cogieron y le empezaron a hablar de futbol, es que no entiendo nada. Ya se van pasando de la raya y yo por ejemplo ya no bajo a pasear los perros por aquí (…) Esto es inaguantable’’.