Abel Illera. 25 años. Burgos. Filólogo
Ha estudiado Magisterio de Lenguas Extranjeras y trabaja en un bar de ambiente. Dice que no tiene empatía con la gente, aunque los que están a su lado se ríen a carcajadas. En los viajes necesita un tiempo para evadirse porque no soporta estar mucho tiempo con las mismas personas. No hace ningún tipo de ejercicio y dice que su fuerza la tiene en la mente. “Quiero demostrarme a mí mismo que no soy un blando, que lo puedo conseguir”.
Beatriz Gómez. 25 años. Madrid. Camarera en un bar “heavy”
Le gusta la música heavy y lleva muchos tatuajes y piercings. Tiene un hijo de tres años al que cuida prácticamente sola. De niña se quedó encerrada en un ascensor y desde entonces sufre claustrofobia. Quiere participar por su hijo y demostrarle que puede conseguir lo que le dé la gana y lo que él quiera, no lo que le imponga la sociedad. “Soy madre soltera y sé que todo lo que me pongan por delante lo voy a superar”.
Carmen Hernández. 30 años. Huelva. Peón agrícola
Además, tiene fobia a bucear y a las alturas, pero quiere participar porque tiene una vida complicada y necesita vivir algo especial que pueda recordar y que le sirva de motivación. Dice siempre lo que piensa, por lo que a veces no resulta fácil convivir con ella. “No he hecho deporte en mi vida y no sé nadar pero puedo con todo”.
Fran Costa. 26 años. Catarroja (Valencia). Desempleado
Es puro nervio, hiperactivo y espontáneo. Dice no temer a nada ni a nadie pero en el programa descubrirá que tiene puntos débiles. Quiere participar porque le gustaría ser el héroe local de su pueblo y tener una calle con su nombre. “No tengo miedo a nada… No pienso las cosas, voy directo a hacerlas”.
Izar Aristondo. 25 años. Ondorra (Vizcaya). Desempleada
Tiene un carácter fuerte, condicionado por una infancia dura. Además, tiene miedo al agua y a los lugares estrechos, pero su obsesión por participar ha suplido sus temores: necesita vivir una experiencia que le aporte fuerza porque se siente insegura y no se quiere a sí misma. “Quiero empezar a ser yo de una vez, quiero quererme más y tener ganas de vivir”.
Juana Muñoz. 39 años. Sevilla. Profesora de pilates
Cambió su vida acomodada como comercial de una multinacional para convertirse en profesora de Pilates. Le gusta llevar la voz cantante y tiene claras sus ideas y opiniones. Le dan miedo las alturas y es incapaz de nadar sola porque tuvo una experiencia traumática en la que casi se ahoga. “Tengo miedo a la profundidad, pero quiero descubrir el límite a mí misma”.
Pablo Ruiz. 25 años. Madrid. Camarero
Toca la batería en varios grupos pero todavía no puede vivir de este trabajo. Tiene un carácter afable, conciliador y enamoradizo. En esta aventura no quiere permitir que nada le distraiga. "Necesito vivir una aventura porque el año pasado fue muy duro para mí. Quiero estar yo solo ante el peligro”.
Raquel Bordes. 23 años. Valencia. Reponedora de supermercado
Vive con su novio y le encanta bailar. Apasionada de las Fallas, tiene un carácter muy sensible pero recupera su ánimo enseguida. No hace deporte y tiene un ligero exceso de peso. Su objetivo es ir a 'Desafío en el Abismo' para demostrarse a sí misma que puede superar este reto a pesar de su físico. “Estoy dispuesta a demostrar a todo el mundo que puedo llegar hasta donde llegan ellos”.
Raúl Armada. 28 años. Bilbao. Organizador de eventos
Surfero y guía de esquí, ha sido socorrista y pertiguista. Practica además trekking y snorkel. En lo deportivo se considera superior a los demás, le gusta tener las cosas bajo control y odia a los torpes. Está estancado laboralmente y necesita nuevas motivaciones. En el programa lo tiene claro: es muy competitivo y va a ir a ganar. “Yo soy como un lobo: fuerte en la soledad y solidario en el grupo”.
Victoria Fernández. 31 años. Málaga. Opositora a policía
Trabajaba en un centro de belleza a la vez que se preparaba las oposiciones para Policía Nacional. Le preocupa su aspecto, hace triatlón, patinaje, full contact, snow, senderismo y trekking. Es motera y tiene también el carné de camión. Está muy segura de sí misma, es orgullosa y despierta muchas envidias desde pequeña. “Soy muy competitiva. No tengo que ser mejor que los demás porque ya soy mejor que los demás”.