Curro viaja a Madrid y se convierte en torero ascendiendo a lo máximo. Es entonces cuando El Faraón descubrió el miedo, la angustia que te atenaza cuando sabes que es tu vida lo que está en juego.
Las reflexiones en la soledad de la noche y el mirar cara a cara a la muerte, hace que Curro comience a plantearse la siguiente pregunta: ¿Merece la pena todo esto?
Son los años 50 y Joselito triunfa con su primera película “El pequeño ruiseñor”. Tras la Guerra Civil, el país sigue sumergido en la pobreza y controlado por el aparato franquista. Los toreros se convierten en una referencia, un ejemplo a seguir para los españoles. El régimen los exhibe como valientes, apuestos y triunfadores, pero una cosa es la España que muestran los noticiarios del Nodo y otra, muy distinta, la realidad que vive el pueblo.
Comienza su vida en sociedad codeándose con todos los grandes de la cultura española e incluso con las grandes celebridades de Hollywood.