Aunque suene como el argumento de alguna película ya existente, el dato es tan real como la vida misma. El Banco de Inglaterra ha insinuado que se plantea sustituir 80 millones de empleo en Estados Unidos y 15 millones en el Reino unido por robots, es decir, en torno al 50% de su plantilla. En principio esto podría ocurrir dentro de entre diez y veinte años, según señalan desde la CNN.
Los avances tecnológicos en esta materia permiten que se automaticen los puestos de trabajo, ya que “tienen la capacidad de sustituir cerebros humanos”, según ha relatado el economista jefe del banco, Andy Haldane al medio estadounidense. Los puestos administrativos, de producción y de oficina en su conjunto son los que están en el punto de mira.
Asimismo, Haldane ha señalado que los puestos de trabajo que quedarían sustituidos serían los de las personas con habilidades medias, que estaría abocados a aceptar trabajos de una categoría inferior, para el que supuestamente estaría más capacitado.
Ni es la primera empresa que deja claras sus intenciones en este sentido, ni es la primera vez que el mundo laboral se ve amenazado por la tecnología, como ya sucedió con la introducción de maquinaria en las fábricas, que suplantaba por completo el trabajo de las personas.