Tras el acto vandálico, que dejó dañada parte de la corteza del Garóe, personal del Centro de Interpretación del árbol sagrado fueron los encargados de descubrir que se había producido una gran quemadura en una de sus ramas. "Hoy nuestro mayor distintivo de la supervivencia del Bimbache y del herreño, y de nuestra dependencia por el agua, ha sido víctima de la intolerancia", explican desde el Cabildo.
La presidenta del Cabildo de El Hierro, Belén Allende, ha informado de que se ha presentado la correspondiente denuncia para investigar el hecho. Además, también se quiere localizar a los posibles autores o autor de "esta fechoría sin precedentes en la historia de este mítico árbol que data del año 1949, aunque sus orígenes históricos se remontan al siglo XVII cuando un huracán lo derribó y no fue hasta el pasado siglo cuando se sustituyó por el actual laurel"
De hecho, Allende ha asegurado que "hoy el Garoé no mana agua, sino lágrimas de dolor ante este atentado sin nombre”, dijo. En estos momentos se ha procedido al cierre del Centro de Interpretación para hacer un balance de los daños y no obstaculizar las labores de investigación.