Si hay una ciudad en el mundo carnavalera por antonomasia esa es Río de Janeiro. Allí se vive el momento de más nervios, donde los componentes de la escuela de Samba entran en el sambodromo para demostrar que son los que mejor bailan, cantan y mejor hacen las carrozas. Van a ser cuatro días de carnaval y se esperan 7 millones de personas disfrutando de toda su alegría, su fantasía, su creatividad y su felicidad.