Los investigadores del caso Marta Calvo, desaparecida hace tres semanas, se centran ahora en su teléfono y en el de su sospechoso. Tratan de reconstruir los movimientos de los dos. Mientras, en la localidad se ha ampliado el perímetro de búsqueda, se ha vuelto a registrar la vivienda del sospechoso y los pozos y cuevas cercanos.
Jorge, de 35 años y colombiano, es el hombre con el que quedó Marta Calvo. Especialistas llegados desde Madrid hasta Manuel, Valencia, buscan pistas en su casa, que ha sido limpiada muy bien. Estos hace pensar a los investigadores que la vivienda puede ser el escenario de un crimen.
Igual que su coche. Un amigo se lo ha entregado a la Guardia Civil. Asegura que el sospechoso antes de huir le dijo que se lo escondiera en una nave porque la Guardia Civil lo buscaba.
Los investigadores triangulan las señales de los móviles de Marta Calvo y del sospechoso. Además, rastrean arquetas, simas o pozos cerca de Manuel mientras buscan a Jorge por toda España. Tiene antecedentes policiales por drogas y lo últimos por conducción temeraria y resistencia a la autoridad.