Fue un vecino de una urbanización cercana quien halló un pozo de tres metros de profundidad en un monte de Poio, Pontevedra. La policía local ha procedido a señalizar el agujero para evitar una tragedia mientras localizan al dueño de la finca. Si no se hace con celeridad, el Concello tomará una decisión al respecto.
Según Greenpeace, en España hya un millón de pozos ilegales pero con permiso o sin él, un pozo sin tapar y sin señalizar siempre puede ser un peligro. Es lo que le pasa al pozo que hay en un parque cerca del casco urbano de Gilet, un pueblo de la provincia de Valencia. Este hombre se dio cuenta el fin de semana que el pozo estaba abierto y decidió alertar a la policía del pueblo.
Su sorpresa llegó cuando horas después pasó por el pozo de nuevo y seguía sin tapar. Optó por hacerlo el mismo con una valla que había cerca. Ahora el pozo de Gilet, que está junto a un parque infantil y un colegio, ya está señalizado aunque de forma un poco precaria con la vaya que puso el vecino y algunas cintas de la policía.
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