Hasta 10 playas han cerrado en la provincia de Valencia en los últimos 20 días por la presencia de la bacteria E. Coli en sus aguas. La playa de Puebla de Farnáls ha sido una de las últimas afectadas que este viernes volvía a la normalidad. “En el tubo digestivo es beneficiosa porque ayuda a compactar las heces, pero cuando se ingiere puede producir irritaciones en el estómago”, comenta Enrique Andreu, catedrático de ecotoxicología.
Lo cierto es que es un problema que ha llegado en pleno verano, y nadie, ni Generalitat ni Ayuntamientos se ponen de acuerdo sobre cuál puede ser el origen. Posibilidades hay muchas, entre ellas desagües. En plena campaña estival, el cierre de las playas supone un jarro de agua fría para quienes vienen a disfrutar de sus vacaciones. Tendremos que esperar para ver si las autoridades consiguen localizar el foco del problema, o si por el contrario se vuelve a repetir este hecho.