Un resbalón que provocó un alud y una cuerda, con la que iban todos atados, que les condujo al peor destino final. Eso, unido a un cambio climático que ha convertido montañas en trampas mortales ha sembrado de dolor Cerdanyola y Sant Cugat del Vallés, de luto. Y a toda España, que vuelve a perder jóvenes en la montaña.
Los cadáveres de los montañistas Adrián San Juan Pello, Sergi Porteros Perello y Gerard Borrul Regal fueron recuperados por los servicios de emergencia movilizados desde el puesto de auxilio rápido de Shilla, que alertó de la desaparición del grupo el domingo a las 17.30 horas. El guía local, Rubén Darío Alva, de 39 años, que les acompañaba, también falleció. Sus cuerpos llegaban envueltos en camillas naranjas a la morgue del Ministerio Público de la ciudad de Huaraz en el fin de una aventura que durante horas fue todo un festejo y ha acabado con lágrimas.
En medio del dolor hubo tiempo para el heroísmo.Veinte miembros de la Unidad de Salvamento de Alta Montaña de Caraz de la Policía Nacional y de la Asociación de Guías de Montaña del Perú se trasladaron a la zona del accidente, donde encontraron con vida al peruano Rubén Darío Alva Diego, de 39 años que, sin embargo falleció al poco tiempo. Al menos, lograron localizar con vida a un cuarto español, Pablo Belmonte Calderón, de 26 años.
Este habló para Noticias Cuatro. Aún con la conmoción en el cuerpo relataba que sus compañeros fueron sepultados por el desprendimiento de hielo cuando descendían. ”Lo peor es ver las heridas de tus amigos”, confiesa al recordar esos instantes a 5.150 metros de altitud. Pablo fue evacuado al Hospital de Carhuaz y más tarde ingresado en una clínica para revisar sus lesiones, pero aunque se siente dolorido el cuerpo no es lo que más sufre ahora.
"El colega tenía mucha experiencia, pero el problema es que ahora los glaciares tienen muchas alteraciones por el cambio climático. Antes era más seguro escalar y ahora hay un cambio que sorprende a los guías de montaña", ha explicado en declaraciones a la prensa el presidente de la Asociación de Guías de Montaña del Perú, Rafael Figueroa. La montaña protagoniza una nueva tragedia.-