En Indiana, un niño de ocho años llamado Curtis Collman ha muerto al confundir la mentafetamina que consumía su padre con los cereales de su desayuno. Según ha informado el portal de noticias británico Daily Mail, el pequeño falleció el pasado 21 de junio después de tragar la dosis de droga que encontró en un plato que había en su cocina.
"Las autoridades que investigan el caso aseguran que Curtis Collman ingirió una dosis suficiente como para acabar con la vida de un adulto", asegura el medio de comunicación. El informe de toxicología que se hizo público el pasado jueves 2 de agosto revela que el niño de ocho años tragó más de 180 pastillas de metanfetamina.
Después de consumir el plato con droga, Curtis Collman comenzó a sentirse mal y tuvo varios ataques con convulsiones. Cuando su padre descubrió lo que verdaderamente había pasado decidió llamar a un amigo suyo para que le ayudase con la situación en vez de acudir a la policía.
El periódico Seymour Tribune también ha informado que el progenitor del niño fallecido amenazó con suicidarse y que aseguró que no volvería a la cárcel por este episodio. Finalmente, Curtis Collman falleció en casa de sus abuelos ya que su propio padre lo trasladó de lugar cuando comenzó con las convulsiones.
Ahora, los agentes y los investigadores se encuentran analizando el caso. Por el momento, el progenitor ha sido acusado de la muerte de su hijo, tenencia de drogas, robo de armas de fuego y de otros cargos relacionados con abusos sexuales.