Esta ha sido la cuarta noche de trabajo incesante en la búsqueda de Julen, el niño que este domingo cayó a un pozo de más de 100 metros de profundidad en Totalán, Málaga.
Hoy podría ser el día de llegar hasta Julen, aunque en las últimas horas la inestabilidad del terreno ha obligado a los efectivos a cambiar de planes. La excavación de un agujero paralelo al pozo pasa a ser prioritario. Las máquinas y taladradoras no han parado en toda la noche, mientras los padres siguen sin despegarse del pozo, con la esperanza de volver a ver a su hijo con vida.
Una larga espera la de los padres de Julen que intentan llevar gracias al apoyo de todo Totalán y a la certeza de que su pequeño sobrevivirá. El hallazgo de los cabellos de Julen reavivó la esperanza, aunque las horas pasan. La Guardia Civil habla de una operación "muy compleja" que "tiene sus tiempos, que son los estrictamente necesarios para mantener la seguridad de todos los que están participando en el rescate."
De las soluciones posibles, viables, que ofrezcan seguridad, tanto para Julen como para los equipos "está la de realizar un túnel paralelo al pozo con un ancho de 1,5 metros, mientras se realiza una labor de succión en el pozo, donde está atrapado el niño intentando extraer todo el material, sedimento, piedras arenas hasta llegar adonde está Julen. "Esa labor es compleja, mientras tanto estamos trabajando en encontrar soluciones".