Un grupo de investigadores de Barcelona quieren analizar los efectos de la contaminación en los fetos. Para ello buscan a mujeres dispuestas a llevar una mochila en la espalda, con la que los científicos medirán cómo afecta la contaminación a su bebé.
El requisito para participar es estar en el primer trimestre de gestación y vivir en Barcelona. La mochila mide el carbono negro, partículas en suspensión y dióxido de nitrógeno.
Eduard Gratacós, director de BCNata, explica que la vida fetal es el inicio de nuestra vida y cualquier pequeña desviación va a representar grandes cambios en nuestra vida. La Organización Mundial de la Salud ha alertado recientemente que el 90% de los niños del mundo respiran a diario aire tóxico. Gratacós sostiene en que este estudio es una gran oportunidad para mejorar nuestra salud.
Carma también está preocupada la salud de su futuro hijo. Como ella otras 1.200 mujeres embarazadas formarán parte de este estudio. Las participantes llevarán la mochila durante 48 horas en el primer trimestre y en una segunda etapa en la semana 32 para determinar la evolución del cerebro y la función cardíaca del feto.