Lo primero que hay que conocer es que si uno no es alérgico no debería temer por su vida. Eso sí, aunque se estima que sólo el 3% de la población es alérgica a estos insectos, basta una picadura, tal y como indica el doctor Joaquín Mato en La Voz de Galicia, para ser alérgico.
De esta forma, tras sufrir una reacción alérgica a una picadura de avispa hay que acudir al médico de cabecera para que valore el caso. Será él el que indique la entidad de la reacción para conocer si sería remitido a los servicios de alergia de la comunidad en cuestión.
Si el caso es este último, se realizaría un estudio detallado para poder saber cómo tratar la reacción alérgica a la picadura. Si en dicha reacción sólo existen síntomas, se le entregaría al afectado un inyector de adrenalina, ya que sería él mismo el que se la inyectaría en caso de picadura.
Pero si por el contrario, fuese necesaria una vacuna, los médicos se la administrarían durante cinco años. Según explica Mato, esta vacuna tiene un 90% de eficacia y los afectados dejan de ser alérgicos.
Además de acudir al médico, hay que saber cómo actuar en un primer momento en caso de picadura de avispa. Además de saber que tenemos que acudir al médico es importante retirar lo antes posible el aguijón (si lo que te ha picado es una abeja, ya que las avispas muerden).
También es importante rascarse lo menos posible en la picadura. Para aliviar esa sensación de comezón se puede aplicar hielo, que también ayudaría a bajar el posible hinchazón que provoca. Del mismo modo, habría que lavar la zona con agua y jabón neutro. Pero recuerda, lo fundamental es acudir al médico de cabecera, ya que él será el que nos indique qué hacer con exactitud.