"¡Sí, pa' que nos mates¡". Así de contundente ha sido la respuesta que una de las compañeras de calabozo le dio a Conchi cuando esta les comentó que podrían ser sus cuidadoras. Y es que Conchi, con los hechos de los últimos días, se ha convertido en una de las tristes figuras de la actualidad. El supuesto asesinato de su marido a las dos semanas de casarse y lo que se va conociendo de su vida la ha convertido en todo un personaje.
Cuatro matrimonios, la muerte de otro de sus maridos degollado por un hermano y haber preparado una cena romántica con el objetivo de matar a su actual esposo han sido ingredientes suficientes para que las cámaras se apostaran hoy a pies del juzgado para verla entrar. Hasta en ese momento la viuda negra montó un show y al negarse a moverse (alegó no encontrarse en condiciones física adecuadas) fue llevada en volandas por la policía.
“Llegamos al calabozo y entonces cuando apagaron las luces escuchamos lo que decían. Él (se refiere al cuidador, también acusado) le decía siempre a ella. Mantén lo que hemos hablado, le decía". Las compañeras confiesan que Conchi les contó todo lo que había pasado y que el móvil del asesinato ha sido que su marido debía mucho dinero y que estaba amenazada. La sensación de ambas es que Conchi no es coherente.