Hace poco más de un año que un hecho insólito sucedió: empleados de un banco y de tres restaurantes en Suiza hallaron atascados en los inodoros de sus lugares de trabajo decenas de miles de euros en billetes de 500.
El caso quedó sin resolver hasta ahora; un año después, la Justicia de Ginebra ha resuelto el misterio y ha decidido qué hacer con el dinero, según un informe de Tribune de Genève.
La Policía de Ginebra guardó el botín total descubierto a la vez que investigaba sobre los propietarios de tal cantidad de dinero. Se sospechó de un hombre y tres mujeres ya que fueron capturados por las cámaras de vigilancia del banco realizando sospechosos recorridos.
Un ciudadano español confesó a la policía a finales del pasado año que el dinero pertenecía a la familia de su mujer, quienes ante las amenazas de delincuentes, prefirieron guardar la suma de dinero en un banco suizo. Sin embargo, el individuo no explicó las razones por las que fueron hallados los billetes despedazados en los inodoros.
El hombre salió libre puesto que destruir billetes no es considerado delito en Suiza. La familia propietaria del dinero no solicitó la devolución del dinero, por lo que el tribunal del caso decidió destinar la misma cantidad con billetes nuevos a los empleados que lo descubrieron.