El perro que atacó al bebé de 17 días en su casa de Fasnia, Tenerife, es un pastor belga malinois, no catalogado como perro peligroso. Tras el ataque escapó y no se ha mostrado agresivo cuando lo han capturado.
Los padres consiguieron separar al perro del bebé pero las heridas que le hizo en la cabeza eran incompatibles con la vida y los servicios de emergencia no pudieron salvarle.
Los padres acababan de contactar con un experto para adiestrar al animal. Señal quizá de que algún detalle les había alertado pero no les dio tiempo a poner solución.
El animal pudo actuar así por celos, estrés previo o una mala presentación del bebé al perro. “Nunca se debe castigar o corregir a los perros delante de los niños porque pueden entender que cuando hay niños delante les pasan cosas malas”, explica Santi Vidal, educador canino.
No hay que dejar jamás solos a los niños con un perro, según los expertos. Si vamos a cambiar rutinas al perro con la llegada de un niño a la familia es mejor hacerlo durante el embarazo. Para que no asocie al bebé con cambios negativos.
Los malinois se usan en deportes extremos pero tanta actividad también puede estresarlo.