Ana Julia Quezada, llora al entrar el jurado popular

Ana Julia Quezada se ha sentado hoy en el banquillo para responder por el asesinato de Gabriel Cruz, el niño de Almería. Siempre fue sospechosa de los investigadores, que la observaron desde cerca hasta acorralarla. Es la primera mujer en nuestro país que se enfrenta a la prisión permanente revisable.

Hoy ha comenzado el juicio con jurado popular en la Audiencia provincial de Almería contra Ana Julia Quezada que se enfrenta a la prisión permanente revisable. Es la primera mujer que en España se enfrenta a esta pena. Aunque su defensa intentará probar que fue un homicidio involuntario y ha pedido para ella solo tres años de prisión.

Ha llegado a los juzgados con un look completamente distinto con americana y pelo liso. Ya ne la sala ha pedido que le quiten los grilletes y ha llorado cuando ha visto entrar al jurado popular, compuesto de siete mujeres y dos hombres.

La conducta de Ana Julia, es a ojos expertos, la de alguien posesivo, con celos patológicos, que actúa con crueldad contra quien se interpone en su camino.

Ana Julia Quezada fue detenida con el cuerpo del pequeño Gabriel en el maletero de su coche. Su detención y confesión del crimen sacudían a todo el país tras 13 días de búsqueda de Gabriel desaparecido el 27 de febrero de 2018 en las cercanías de la casa de su abuela en Las Hortichuelas, Almería, donde ahora se le recuerda con un mural.

Desde la desaparición de Gabriel, el hijo de su entonces pareja, estuvo junto a ellos participando en la búsqueda. Los investigadores sospecharon de ella desde el principio y los padres del niño lo sabían y tuvieron que aguantar la compostura.

Sobre Ana Julia Quezada pesan otras sospechas, como la nunca aclarada muerte de su primera hija, una niña que cayó por la ventana de un séptimo piso en Burgos, cuando Ana Julia vivía allí con su pareja con la que tuvo otra hija, hoy mayor y que declarará en el juicio que empieza.