A él no le importó que ella fuera conduciendo. Le soltó un fuerte puñetazo y le arrebató el volante en un gesto brusco que les llevó a dar varias vueltas de campana.
“Volvían de fiesta discutiendo. Podía haber muerto mucha gente”, asegura una vecina.
Nada más producirse el accidente, el presunto agresor llamó a un amigo para que fuera a recogerle, pero la llegada de la Guardia Civil y el testimonio de la chica evitaron que se marchara del lugar.
Todo ocurrió en la autopista de circunvalación de Palma, a la altura de la calle Aragón.
Los vecinos de la zona están indignados. ”Creo que deberían tomarse medidas al respecto”, comentan.
El agresor fue detenido y llevado al hospital con el resto de heridos, todos de carácter leve.