Para conocer los efectos del alcohol cuando se conduce una moto, la DYA ha instalado en Bilbao un simulador que hace sentir como si hubieses triplicado la tasa de alcohol, al ponerse estas gafas conducirá como si estuviera borracho.
En estas condiciones no hay tiempo para reaccionar, cualquier imprevisto es letal, la sensación es muy real y muy dura. Cuando alguien se enfrenta al peligro es consciente del riesgo.
En uno de cada 3 accidentes está implicado el alcohol y con esta campaña se quiere concienciar a los motoristas para que no conduzcan si han bebido.