El Gobierno ha anunciado cambios importantes para hacer la petición del ingreso mínimo vital, es decir, la cuota que aporta el estado para que todas las personas en una situación de vulnerabilidad económica puedan tener, al menos, un ingreso base. Estos cambios se aplican para agilizar el proceso de las más de 900000 solicitudes que se han recibido; muchas de las cuales, dado al volumen de trabajo, todavía no se han podido gestionar.
Que ya no hay que darse de alta en el paro antes de hacer la solicitud, pero si es aceptada, sí hay que pedirlo en un plazo de 6 meses; que ya no hay que entregar física y presencialmente el certificado de empadronamiento, cosa que estaba retrasando mucho la gestión; que se amplía la retroactividad y también el plazo para analizar cada expediente, pasando de los 3 a los 6 meses.