Zhasmina Leontyeva, de tres años, fue la única persona que sobrevivió al accidente aéreo que tuvo lugar en un bosque de Rusia el mes pasado. Se trataba de un Let L-410 Turbolet, un bimotor comercial, en el que viajaba la tripulación junto con seis pasajeros abordo.
La niña fue encontrada entre los restos de la aeronave y los cadáveres de los pasajeros. Estaba llorando y no era muy consciente de lo que acababa de ocurrir. Tenía una pierna rota pero no sufría daños mayores.
Fue su maestra, Olga Laponnikova, quien protegió a la niña con su propio cuerpo cuando el avión se precipitaba hacia el suelo, según comentó el equipo de rescate.
Nikolay Rybachuk, el cirujano que la trató, declaró a Mirror, "¿Pienso que es un milagro que la niña haya sobrevivido en esa picadora de carne? Por supuesto, lo es. Esto realmente fue el destino de Dios. Desde un punto de vista médico, ella escapó fácilmente".
Su tía, Olga Leontyeva, explicó que no es la primera vez que Zhasmina se aferra a la vida, ya que nació prematuramente y los médicos confirmaron a sus padres que era muy complicado que sobreviviera, pues estaba demasiado débil. "Dios no la dejó morir entonces, gracias a los doctores. Y de nuevo, habiendo caído desde esa altura, Zhasmina es la única que ha sobrevivido al choque", apunta.
La madre de la pequeña se muestra muy agradecida y sorprendida de que su hija haya sobrevivido al accidente, "Ella debe tener un poderoso ángel de la guarda. Es un milagro. Simplemente un milagro".
Según las investigaciones realizadas, el avión se accidentó debido a un fallo repentino del motor derecho de la aeronave, que dejó de funcionar imposibilitando el vuelo.