Iris Hernández-Rivas, de 20 años, fue la que alertó a la policía de los hechos. Al personarse los agentes en la vivienda de Gaithersburg (Maryland), la mujer aseguró que su hija pequeña fue a ducharse y al rato encontró la encontró tumbada en la bañera.
Los servicios de emergencias trasladaron a la menor a un centro de salud. Allí se descubrió que tenía múltiples heridas en el cuerpo por lo que se volvió a tomar declaración a la madre. Fue entonces cuando la joven reconoció que había dado un fuerte golpe en el abdomen a la niña porque ésta no quería lavarse los dientes.
Hernández-Rivas aseguró que la menor se cayó hacia atrás, golpeándose la cabeza, tal y como publica Fox News.
Finalmente, la menor falleció y la policía detuvo a la madre por un delito por abuso infantil de primer grado y un delito de asalto de primer grado.