Cuando los diputados se disponían a votar, una primera bomba de humo interrumpía la sesión. Los parlamentarios han tenido que abandonar el hemiciclo hasta que la sala fuese ventilada. Humo que según cuenta el diario The Guardian era más bien gas lacrimógeno, lo que provocó que varios diputados tuviesen que recibir asistencia médica. El presidenet de Kósovo, Hashim Thaçi, denunciaba en Twitter lo que según él había sido un intento de acallar la voluntad del pueblo kosovar.
Cuando regresaban a la cámara, una segunda bomba de humo volvía a interrumpir la votación, que a pesar del intento de boicot fue aprobada por aplastante mayoría. Tras el voto a favor de la cámara, Thaçi volvía a Twitter para celebrar lo que calificaba de mal menor (el acuerdo de frontera con Serbia) a cambio de la libre circulación de los kosovares en territorio de la U.E.