Hawkins, de 19 años, llevó a sus hijas, Addyson, de dos años, y Brynn, de uno, al hospital en el condado de Kerr, Texas, EEUU. Les dijo a los médicos que las niñas se habían desmayado al oler unas flores en el parque. Sin embargo, las menores murieron en el hospital después de pasar más de 15 horas encerradas en un coche sin agua ni comida mientras su madre estaba de fiesta en casa de un amigo.
Aunque, según informa Fox29, alguien en la fiesta sugirió llevar a los niños dentro, la madre se negó. Cuando fue a buscar a sus hijos a la mañana siguiente, las niñas estaban inconscientes a 33 grados. En lugar de llevarlas de inmediato al hospital, les dio un baño y les cambió la ropa.
Esta madre adolescente hace semanas pedía dinero en Internet para poder comprar una casa para ella, sus hijas y su pareja. Entonces explicaba que quería salir de casa de sus abuelos, donde vivía y aunque ella y su pareja trabajaban no era suficiente para independizarse.
Amanda Hawkins, está acusada de abandono de menores pero los cargos podrían aumentar tras la muerte de sus niñas y enfrentarse a dos años de cárcel.